sábado, 5 de noviembre de 2011

A veces elegir un camino es una decisión demasiado difícil para seguir, y es que tenemos miedo de perder, de equivocarnos, de pasarlo mal. Por eso pensamos una y otra vez que hacer, pensamos en todo lo que podríamos ganar, pero sobre todo en lo que podemos perder. Y todo esto para que, si después de pensar y pensar, nos acabamos equivocando. Te has equivocado pero  no importa, por varias razones, la primera es que te vas a equivocar mil veces más y la segunda porque a veces cuando te equivocas y echas la vista atrás y luego hacia delante te das cuenta de que no solo has perdido cosas, sino que también las has ganado, o al menos lo has intentado. Quizás de algunos errores, obtengamos grandes aciertos. Así que no te detengas nunca, vive al límite y si te equivocas, búscale el lado bueno. Todo en esta vida pasa por algo así que con el tiempo te darás cuenta de que esos errores que en su día cometiste, hoy son lo mejor que te ha podido pasar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario